lunes, 6 de enero de 2014

José María Pallaoro




















Pasar el invierno

“El invierno
abomina
de los pájaros”
comenta
mi vecino
con un bidón
de nafta
pronto a estallar.


Massera

Cuando desperté
a las cuatro de la tarde
de un ocho de noviembre,
el monstruo ya no estaba.


Lo que salva

Han partido.
Todos han partido.

Salvo los perros
de la noche,
los que marcan
la cancha
para mantener
viva
la música.

La que salva.


Un leve gesto

De una manera
de la que quisiéramos
desentendernos,
la mirada del otro
nos escruta
y con un leve gesto
nos vamos
en busca
de un poco
de aire fresco.


Carrusel

En el país de los justos,
el pecador es más feliz.


Gema

Miro
en tu espejo
y sólo veo
tu piel
de luna

y mi deseo.


Basuritas

"Nada de pensamientos"
dice la muchacha de falda liviana
que cierra y abre las piernas
como si fuesen ojos
molestos por una basurita.


El sueño de dormir sin sueños

En la conversación,
cucharadas de soledad.

Tu claro pelo
se quiebra, enmudece.

No hay vacuna
para el mal de estos días.

La ortodoxia de mirar de frente.
El sueño de dormir sin sueños.


La clara verdad

Ni un temblor en sus ojos.

Frías esmeraldas, ajenas, implacables,
en una calle cualquiera de La Plata.


Platón

Tu cuerpo y mi alma.
Tu alma y mi cuerpo.

Lejos de la clara desdicha,
una significación nueva:

la soledad desnuda
la carencia de vos.

Una dimensión sin sentido,
el oscuro silencio.


Soolaimon

Aún resuenan en mis oídos
tus palabras:
“cuando yo ya no esté
te vas a arrepentir”.

Pensaba en esto
y el teléfono sonaba.
Cuatro veces sonó.
Hasta que el contestador
repitió como lorito
alguna tontera que grabé
y un breve fragmento
de all you need is love.

No dejaron mensaje.

Y esto ocurría mientras miraba
algo por la tele
pensando en lo que dijiste
la otra noche.

Que la paz sea contigo.


Maderas y piedras

No sabemos qué hacer
con las maderas y las piedras.

Y quedamos en lugares distintos,
en cualquier lugar.

Una ensalada

en el sentido no vegetal,
en el sentido de la confusión.

No des crédito a todo
lo que te digan.

La búsqueda es no encontrar.

Fuente: Una piedra haciendo patito, José María Pallaoro, Libros de la talita dorada, Buenos Aires, 2013.

José María Pallaoro nació en La Plata el 28 de febrero de 1959. Publicó los siguientes libros de poesía: El viaje circular (1998), Pájaros cubiertos de ceniza (1999), Son dos los que danzan (2005), Basuritas (2010), Setenta y 4 (2011), 33 papelitos y una mora horizontal (2012), Una medida adecuada a todo (2012) y Una piedra haciendo patito (2013). En 2012, dio a conocer  una reedición ampliada de Son dos los que danzan. Este mismo libro fue traducido al italiano y al esloveno y publicado en 2013 por el Centro de Estudios Interculturales del Departamento de Estudios Humanísticos de la Universidad de Trieste con el título Sono due quelli che danzano / Ples v dvoje. La versión al italiano fue realizada por la profesora y escritora Ana Cecilia Prenz Kopusar y la traslación al esloveno por la misma traductora en colaboración con el poeta esloveno Marko Kravos. Juan Octavio Prenz, autor del prólogo, señala: “En Pallaoro la palabra cumple honestamente con esa primera misión que es la de designar, a partir de lo cual son posibles todas las variantes connotativas y sin la cual existe siempre el peligro del abismo o del caos. En el supermercado lingüístico en que se ha convertido nuestro mundo, el cuidado por la palabra de que hace gala Pallaoro no es habitual. Llaneza, que huye de la banalidad, palabra que es roca o miel, cuando el objeto a expresar así lo requiere, que hiere o enternece, su poesía quiere apuntar al blanco con la precisión de la flecha”. Pallaoro tiene, además, numerosos poemarios inéditos en papel, entre los cuales cabe mencionar: Breve cielo, Latidos, Cuando llueve el mundo es otro (1985-1989, en revista Sismo Trapisonda, nº 1, 08/2008), En medio de la lluvia, Es hora de volver a Jimmy Hendrix, El bostezo del viento, Andante tren (2001, en revista Sismo Trapisonda, nº 3, 06/2009), El estado de las cosas, El vino del azar y Spinetta. Como difusor cultural, condujo programas  de radio en FM (La máquina del tiempo, En la vereda del sol, Mariposas de madera, La talita) y dirigió la revista de poesía El espiniyo. Actualmente, es editor de Libros de la talita dorada y administra los blogs literarios Aromito, Poesía La Plata, Poesía City Bell y Los ojos. Vive en City Bell, partido de La Plata, donde coordina el Espacio Cultural La Poesía y un taller de escritura.   

Foto: José María Pallaoro. Fuente: Gentileza de José María Pallaoro.

2 comentarios:

  1. me gustan estos poemas de JM!. Son contundentes (y, tal vez, más políticos en algún sentido)...No había leído nada de este libro. Cariños!

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  2. Gracias, Norma, un beso grande y a encontrarnos pronto!
    jm

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